Atez Atekoa: Usurbilera dakarzkiguten zabor “turista”

Atez Ateko-aren 2. urteurrenera etorri zirenek botatako hondakinak.

La basura que nos trajeron los que vinieron a celebrar el 2º aniversario del Puerta a Puerta.



Hoy, como todos los domingos me dispongo a mi rutina dominical: desayuno en el bar, paseo, otro cafecito, comprar pan y periódico y vuelta a casa.

Salgo temprano de casa, hacia las 8:30, con mi bolsita de "rechazo". La cuelgo reglamentariamente en el ganchito que me corresponde y me dirijo hacia mi desayuno. Cielo gris, fresquito. Parece que hoy desayunaré fuerte; me apetece.

Desde el otro lado de la calle un amigo me hace gestos para que me acerque. Cruzó la calle. Por la cara que tiene me parece que se va a desahogar conmigo.

Le suelto un:  hola Fermín, ¿que tal? ¡tienes cara de no haber dormido hoy!

No me toques los coj... No he pegado ojo con el chumpa, chumpa durante toda la noche. Tanta celebración del puerta a puerta me tiene negro. ¡Y encima esto! ¿Ya ves como lo han dejado?; y me señala la estampa que encabeza este escrito.

Es que no hay derecho - prosigue - pero, mira, mira, ¡si han dejado en el suelo hasta botellas de vidrio!¡Pero si por lo menos nos quedan los contenedores de vidrio!, que los usen, que los usen.

Y sigue desahogándose: En vez de tanto decibelio y festejo, mejor si les hubiesen dado un cursillo a todos estos visitantes que hemos tenido esta madrugada, de qué es papel, qué es vidrio, qué es envase de plástico... Y sobre todo, que en este pueblo, ya que no tenemos papeleras, que lo que se trae uno, se lo vuelve a llevar a su pueblo, en el bolsillo.

Saco un fotito "del delito" y con un, tranquilo Fermín, que por lo menos lo han dejado ordenadito, me despido. A los metros me grita: si hoy es domingo, ¡sólo van a recoger el rechazo!¡lo demás lo van a dejar aquí!. Pues es verdad.

Me enfrento al desayuno completo. Mientras tanto voy ojeando los titulares de un diario. Detrás de mi una cuadrilla de chavales que todavía les quedan fuerzas para seguir disfrutando del aniversario. Según sus comentarios parece que fue un "conciertazo".

Parece que va a chispear pero me dirijo a caminar mi circuito dominical. Una horita de caminata.

A medio camino me encuentro con Patxi y su perra. Me dice con sorna: Ando de cacería y no puedo parar. No te entiendo le contesto. Si hombre, estoy buscando el Zero Zabor Acústico, agur.

Qué gracia tiene el Patxi; pero, me da que pensar.

En este pueblo, que estamos tan preocupados por la sostenibilidad medioambiental, que hacemos estudios de contaminación del aire, de contaminación electromagnética, preocupados por enfermedades derivados del desarrollismo. Que, hasta nos parece bien que el ayuntamiento esté reduciendo y eliminando la iluminación pública en algunos lugares por aquello de la contaminación lumínica. ¿Nos preocupamos de la contaminación acústica?

Termino el circuito. Ahora un cafecito, comprar el periódico, el pan, y para casa.

El café en la barra. Está caliente. Al lado, de pie, tres personas comentan algo sobre el concierto. Presto atención.

"Ha venido mucha gente", "sí, pero esperábamos más", "la gente está contenta, que es lo que importa", "el grupo que hemos traido, Berri Txarrak, tienen tirón", "sí, sí, y un buen bolsillo, que el ayuntamiento les ha pagado 20.000 euros".

Vaya, vaya. Apuro el café y me marcho para casa que son las 10:30. Otra vez Fermín.

A distancia me dice señalándome con el dedo al suelo: mirá, mirá; sácale una foto a esto. Hoy sí se están esmerando los recogedores del Puerta a Puerta. Se lo han llevado todo. ¡Hasta las botellas!

Me sale la risa. Todo no Fermín. Se dejan el kalimotxo, que es orgánico y lo recogerán mañana.

Un día más del Puerta a Puerta en Usurbil.