BILDU DE ASTIGARRAGA ENGORDA A GARBITANIA

El Ayuntamiento de Astigarraga, en decisión en la Comisión de Hacienda del día 14 de marzo, que pasará a pleno, ha decidido comprar acciones de la empresa Garbitania por valor de 90.000 euros. A pesar de las explicaciones del alcalde, diciendo que esta le parecía, entre otras, la mejor opción, todos sabíamos que iba a ser la empresa que se iba a encargar de la recogida y tratamiento de los residuos urbanos. Todos sabemos en esta cuenca de Buruntzaldea que Garbitania es la empresa pública montada por Bildu. La decisión, por tanto, era inevitable.

También hay que decir que el consistorio de Bildu compra acciones de esta empresa para evitar tener que sacar a concurso público la contratación de ese servicio. En época de vacas flacas, Bildu engorda Garbitania. Encima el equipo de gobierno tiene el cinismo de vestir esta decisión con este tipo de afirmaciones: “por fin una recogida de residuos responsable”.

El equipo de gobierno tiene el descaro de decir que con esta decisión, “se debe priorizar el interés público, no como sucedía hasta ahora donde se supeditaba el interés público en favor de intereses privados. De esa manera, los ciudadanos financiaban los beneficios económicos de algunas empresas privadas”. Esta acusación genérica, pero con el típico toque traicionero del actual alcalde, ya que no cita ningún caso –por que eso sería imposible- pretende esconder el hecho indudable de que el ayuntamiento de Astigarraga se va a convertir en socio de una empresa montada por Bildu.

Y esconde el hecho, todavía más contradictorio con la acusación al anterior equipo de gobierno de favorecer “intereses privados”, de que el ayuntamiento de Bildu contrata por decreto de alcaldía y con el valor de decenas de miles de euros a una serie de empresas privadas para esta cuestión de la recogida de basuras. Como por ejemplo a Spora, 3610 euros por suministrar contenedores para las zonas de emergencia, a Spora también, 14.241 euros por contratar contenedores para repartir en los comercios, otra vez a Spora, por 20.981 euros, por contratar colgadores para el servicio del puerta a puerta, y también a Spora, por 13.769 para la contratación del suministro de herramientas para el seguimiento de la recogida de basuras puerta a puerta. Asimismo a Perfide 37.638 euros para contratar las obras de las zonas de emergencia, Montajes Industriales Mattilan 10.819 euros por contratar la colocación del servicio de colgadores del puerta a puerta, Industrias Hiruburdin S.L., por 21.617 para el suministro del servicio de colgadores. Si a esto añadimos que la empresa Spora gana el concurso de suministro de bolsas de basura (31.204 euros) y de baldes pequeños (61.998 euros), suman en total 215.881 euros, que debemos añadir a los 90.000 euros de acciones de Garbitania. A esto se le llama tirar el dinero a la basura en plena crisis económica. Cuando el municipio tiene tareas pendientes, necesarias y urgentes que claman la acción del ayuntamiento, como la urbanización de Anuska, el bidegorri al campo de futbol, la mejora y mantenimiento de los caminos de la zona rural, barrio de Santiagomendi, la Guardería, la compra de la reserva de suelo para la Ikastola…. Todo esto es secundario frente a la imposición de su sistema de basuras.

Como se trata de vestir la mona como sea, el equipo de gobierno nos habla de los alrededor de 725 vecinos que se han acercado a las reuniones del proceso participativo. Sin mencionar que muchos de esos vecinos están en contra del sistema del puerta a puerta, como lo manifestaron en esas reuniones y el alcalde lo sabe, y de las 2000 firmas recogidas en Astigarraga en contra de ese sistema. Nunca se gastó tanto dinero para imponer un sistema tan impopular.

Hamaikabat Astigarraga